¿Estresado? Por supuesto que sí. ¡Eres un administrador de sistemas!
No soy médico ni experto en estrés, pero compartiré contigo lo poco que he aprendido a lo largo de los años. Soy una persona bastante estresada, como cualquiera de los que he trabajado. Sin embargo, creo que lo manejo mejor que antes.
Este capítulo trata sobre algunas fuentes comunes de estrés y qué hacer con ellas, algunos consejos sobre las vacaciones y una pequeña historia sobre cómo aprendí a relajarme. Es un consejo que me he encontrado dando una y otra vez, a veces cuando doy conferencias en el camino o cuando socializo con otros administradores de sistemas o compañeros de trabajo. Mucho de esto es más filosofía que ciencia. No es un discurso completo o erudito sobre el tema, pero debería darte algunos consejos útiles y señalarte la dirección correcta para encontrar más información.
El estrés es el desgaste que sienten nuestro cuerpo y nuestra mente cuando las cosas cambian. Hay estrés positivo y estrés negativo. El estrés positivo añade expectación y emoción a nuestras vidas, nos ayuda a ser creativos, nos ayuda a ganar una carrera o unas elecciones, o nos empuja más allá de lo que antes creíamos que eran nuestros límites. El estrés negativo es destructivo. Provoca enfermedades cardíacas, depresión y canas. Controlar el estrés es una parte importante del mantenimiento de una buena salud mental.
Curiosamente, la misma situación puede ser un estrés positivo para una persona y un estrés negativo para otra. Todo depende de cómo lo afrontemos. Por ejemplo, las personas tienen reacciones diferentes ante los cumplidos de un jefe. Para algunos, tal cosa sería buena. Otros podrían tener la reacción contraria. Podrían pensar: “¡Oh, ahora siempre se espera que tenga tanto éxito! No puedo soportar la presión”. Podrían pensar: “Ha dicho eso delante de todo el mundo. Ahora todos me odian!” y se preocupan de que el resto del grupo pueda estar celoso y vengativo.
No es lo que nos ocurre lo que nos causa estrés, sino cómo reaccionamos ante lo que nos ocurre. He encontrado Feeling Good: The New Mood Therapy (Collins) y The Feeling Good Handbook (Plume) son libros extremadamente útiles y muy apreciados en el ámbito de la gestión del estrés de forma productiva. Muchas personas han dado un giro a sus vidas con la ayuda de estos libros.
Debemos esforzarnos en relajarnos para que se nos dé bien. Tenemos que reservar intencionadamente tiempo para relajarnos y desarrollar la disciplina para no posponerlo. Es la higiene mental. Puedes dejar de lavarte los dientes de vez en cuando, pero a la larga sufrirás. Del mismo modo, puedes saltarte las cosas que haces para la higiene mental de vez en cuando, pero a la larga sufrirás. Cuanto más practiques la relajación, mejor lo harás.
Todos los fumadores que conozco parecen estar muy relajados en el trabajo. No creo que todo sea por la nicotina. Creo que es el hecho de que salen de la oficina cada dos horas (no permitimos fumar dentro del edificio). Eso rompe el día. El estrés se acumula un poco, y luego se reduce al salir. El estrés se acumula, y luego se sale. No estoy recomendando que se fume, pero le animo a que salga al exterior cada dos horas, estire las piernas y adquiera algo de perspectiva.